Cámara frigorífica para la conservación de alimentos y productos
El ser humano por su afán de ir simplificando los procesos de conservación de alimentos, ha ideado sistemas y equipos que permiten tal proceso. Es así como surge la primera máquina de hielo que sucesivamente se transformará y consolidará la cámara frigorífica. Este equipo se mantiene en absoluta vigencia actualmente y no está exenta a los cambios e innovaciones tecnológicas.
El salazón fue uno de los métodos usados en la antigüedad para la conservación y aún es usado para mantener determinados productos. La cámara frigorífica, además, ha permitido desde el constante comercio de alimentos que se consumen en el planeta. Este equipo ha sido adaptado a las diferentes necesidades y espacios que con los que cuentan las industrias, supermercados y negocios, y también se les denomina cuarto frío.
Igualmente, la cámara frigorífica ha logrado ocupar todos los niveles de la sociedad, desde el uso doméstico hasta el más industrializado. Sectores como la hostelería, el farmacéutico, la energía o la investigación, entre otros, han encontrado en el uso de estos equipos el mecanismo más idóneo para lograr la preservación y conservación de sus productos.
Factores y consideraciones en el uso de una cámara frigorífica
La cámara frigorífica puede tener diversas modalidades como refrigeradores, túneles de congelación y congeladores. Cada una posee características particulares que permiten ser usadas para cada tipo de alimento o producto. Las condiciones de temperatura pueden variar entre un producto u otro en función de que puedan mantener por mucho más tiempo sus características y cualidades organolépticas hasta llegar al último eslabón de la comercialización que es el consumidor.
Por tal motivo, numerosos fabricantes han ideado diversos modelos y tipos de cámaras de frío que se adaptan a las condiciones propias de los clientes. Sin embargo, antes de seleccionar alguna cámara frigorífica, es pertinente conocer las diversas condiciones operativas y externas bajo la cual operará con el fin de lograr su mayor rendimiento y optimizar su funcionamiento alargando su durabilidad.
En el mercado,se pueden encontrar cámaras frigoríficas con materiales resistentes al lavado y de fácil limpieza para evitar la acumulación de posibles hongos o bacterias. La cámara frigorífica funciona como cualquier equipo de refrigeración mediante componentes como un compresor, evaporador y condensador, los cuales trabajan con gases refrigerantes. Estos gases poseen las características de ser altamente tóxicos y perjudiciales para el medio ambiente. Por esta razón, diversas legislaciones han surgido para la correcta utilización de los mismos.
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