En qué consiste la ventilación mecánica controlada para regular la temperatura y calidad del aire

Desde siempre, la primera opción de acondicionar y climatizar un espacio ha sido a través de la ventilación. La renovación del aire por uno más fresco y limpio mediante las aberturas de ventanas y puertas es la primera opción, pero se convertiría en un punto en contra en el momento que las temperaturas fueran sustancialmente bajas o altas. A partir de allí, se generaría un desequilibrio térmico dentro del espacio. Sin embargo, se ha innovado en el campo a través de la ventilación mecánica controlada con la que se logra refrescar y renovar el aire interno a fin de hacerlo mucho más habitable.

La ventilación mecánica controlada es muy común en sus aplicaciones. Sobre todo, ante el significativo ahorro energético que representa para el usuario. Asimismo, se ha logrado usar la ventilación de doble flujo. Bajo este principio, el aire nuevo se adecúa a la temperatura interna del espacio. De este modo, las perdidas energéticas se reducen y se puede evitar recurrir a la calefacción. Para ello, la hermeticidad juega un papel importante para la eficacia del sistema en general.

A través de la ventilación mecánica controlada se introduce aire desde el exterior a través de conductos usando la electricidad. Primeramente filtrándolo con el fin de proporcionar mayor calidad del aire. Estos conductos se distribuyen de manera discreta en todo el espacio, culminando con rejillas que permiten la salida del aire.

Aspectos relevantes de la ventilación mecánica controlada

Las diferentes variables de la ventilación mecánica controlada permiten clasificarlas en ventilación de flujo simple, de flujo doble y de flujo higrorregulable. En el primero, el aire es introducido mediante unos conductos mientras se extrae el aire interno viciado. Por su parte, con el sistema de doble flujo resulta un poco más complejo el funcionamiento. Sin embargo, resalta por el considerable ahorro energético que representa. En caso diferente el sistema de flujo higrorregulable, la ventilación es adaptable a los niveles de humedad que existen dentro del recinto. Su utiliza por lo general, en edificios de viviendas plurifamiliares.

El manejo de sistemas de ventilación híbridos puede resultar ser otra opción factible cuando se usa ventilación natural y la mecánica. Siempre y cuando se cuiden los factores climatológicos. La ventilación mecánica controlada resulta muy ventajosa pues aparte de proveer de un bienestar térmico a cualquier recinto, suministra un valor agregado en lo que respecta a la contaminación externa. Del mismo modo, extrae cualquier elemento que al inhalarlo pudiera ser perjudicial. Además, mejora el mecanismo metabólico del organismo, reduce la posibilidad de los choques térmicos en las personas que se mantengan dentro de los recintos.

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